Pamplona no es una ciudad con una población demasiado numerosa, al contrario que otras megaciudades de España. Pero, sin embargo, sus gentes quieren estar a la vanguardia de todo, no quieren quedarse anclados en el pasado, como les sucede a muchas capitales del norte de la península, que están sufriendo despoblación, con todo los problemas que eso conlleva. Mantenerse en la vanguardia en cualquier tema y en cualquier ámbito de la sociedad es la clave, y de eso son muy conscientes las autoridades pamplonesas y, en general, todos sus habitantes.
Este mes de junio es un momento del año donde se celebran las fiestas mayores, y también otras grandes festividades, de muchos municipios españoles. Y también es cuando se celebra a nivel mundial el Día del Orgullo Gay, el evento de mayor envergadura del colectivo LGTBI. El desfile en honor de esta celebración ha sido siempre un espectáculo, y en él se han volcado multitud de personas de este colectivo, deseando que fuera cada año más espectacular y especial. Sin embargo, las circunstancias han hecho que ni en 2020, ni en el año actual, se haya podido celebrar este evento, aunque por supuesto eso no quita que el Día del Orgullo no sea un motivo de celebración para tantas y tantas personas en el mundo.
Por eso, la noticia de que Pamplona pinta bancos con los colores del arcoíris ha sido acogida por el colectivo LGTBI con mucha alegría. Y sobre todo, debido al carácter conciliador y tolerante de toda la ciudadanía pamplonesa, como una forma de homenajear a este colectivo, cuando su mayor evento no se ha desarrollado de la forma que todos hubieran deseado. Así, con el símbolo internacional que representa la bandera gay, hombres homosexuales se ven reconocidos en estos mobiliarios urbanos pintados con los colores que los representan, un símbolo de diversidad y libertad, que fue concebido en 1978 por Gilbert Beker, un activista norteamericano a favor de derechos de los hombres y las mujeres homosexuales.
Más allá de esta iniciativa, que tiene contento a un gran sector de la sociedad, hay algunas voces que no están tan de acuerdo con que esta clase de manifestaciones puedan tener algún valor. Es decir, quizá un gay xxx esté cansado de ser representado como un hombre que necesita ser reconocido, sin que esto pueda dejar que realmente se normalice en sociedad la existencia de sarasas y lesbianas. Es una manera de hacer visible el colectivo, claro que sí, pero por ejemplo también lo serían los videos porno de gays que vemos en internet; en ellos, más allá de los actos sexuales, puedes ver a hombres follando con hombres en multitud de situaciones, y no parece que su manera de relacionarse sea diferente a la de una pareja heterosexual. Entonces, ¿es realmente necesario dedicar un día al Orgullo Gay, como si tener esa condición sexual fuera algo extraordinario?
Normalizar la homosexualidad, o cualquiera de las otras orientaciones sexuales que podemos encontrar en la sociedad, debería ser una prioridad en nuestro primer mundo, eso es indiscutible. Lo que claramente se discuten son los procedimientos a utilizar para ello, ya que cada cual tiene una manera de pensar distinta, y distintos proyectos, como hemos podido ver. Pero sin duda Pamplona se ha esforzado por hacer de este evento LGTBI algo significativo, que todos pudieran ver y disfrutar… o no: al fin y al cabo, son unos bancos al aire libre que sirven para sentarse. Aun si no eres activista o no te parecen ciertas actuaciones del colectivo gay, seguro que eso no te impide usar este mobiliario urbano para lo que es.